Cuando el equipo de El otro lado de La Isla se puso en contacto conmigo para invitarme de nuevo a escribir a su blog no puede evitar decir que sí. Sin embargo, quizás debí esperar a conocer el tema que me proponían ya que cuando lo escuché empecé a ponerme nerviosa. ¿Qué sé yo de cómo se escribe un buen post? Poco a poco, con sus palabras que alegaban a que si era periodista y blogger algo interesante sobre este tema tendría que decir, me lancé a escribir este post y, como os podréis imaginar, las claves que doy a continuación no garantizan ningún éxito pero son pequeños trucos que a mí me sirven en mi día a día como bloguera ¡Allá van!
1. ¿De qué tema escribo? Sin duda, esta es la primera pregunta que surge cuando nos enfrentamos al temido folio en blanco. Sin embargo, hay algunas pautas que podemos seguir y que nos pueden ayudar a decidir el tema del post: de qué habla la competencia o blogs similares, fijarnos en las modas o eventos temporales para aprovechar su tirón pero, sobre todo, hay un tema que no falla nunca: aquel en el que nos sentimos a gusto y sobre el que tenemos algo que decir.
2. ¡Estupendo! Ya tenemos el tema del artículo. Ahora llega el momento de documentarse y leer. Sí, para escribir una hoja hay que haber leído cien. Así lo decía Kapuscinski y así ha de ser para que nos quede un post de calidad y de interés para nuestro público. Leer distintas fuentes, contrastar la información y crear un contenido de calidad debe ser el día a día del bloguero… ¿No creéis?
3. Y el tercer punto es… ¡escribir! Para ello yo sigo diferentes premisas según el contenido, la extensión o el medio en el que se vaya a publicar el artículo. No todo sirve para cualquier plataforma o al menos yo no concibo igual el escribir para mi blog que el hacerlo, por qué no, para este blog de la Isla. Por ello, mi consejo, que puede ser extensible a casi cualquier caso, se basa en empezar con una pequeña introducción, de aproximadamente un párrafo de extensión, continuar con los puntos o el tema principal (aquí es muy importante pensar en qué se quiere decir y cómo decirlo) y terminar con una pequeña conclusión.
4. ¿Qué tono debo darle a mi post? Obviamente esto dependerá de el tema sobre el que esté escribiendo y del formato y el medio en el que se publicará. Este artículo de hoy lo he comenzado con una pequeña anécdota que no tendría cabida en un artículo de periódico o de revista. Aun así, soy partidaria de darle siempre, siempre, siempre un toque personal a todo lo que escribo. ¿Qué pensáis vosotros?
5. Y para terminar no hay que perder de vista que un buen post también es aquel que es leído, compartido y comentado por los lectores. Con ello volvemos al primer punto ya que aunque debemos escribir sobre lo que nos apetezca, nunca hay que perder de vista a nuestra comunidad porque ¿qué sería de los bloggers sin ella?
Espero que os sean de utilidad estos puntos y no perdáis nunca de vista que un buen post es aquel que está bien escrito y que respeta las normas básicas de puntuación y de ortografía. Esto puede parecer obvio pero por desgracia no siempre es así y es común ver algunos fallos (casi) imperdonables. De la misma manera mi consejo personal es escribir siempre aportando un contenido de valor ya que blogs y bitácoras hay muchas así que si tienes algo que te diferencia de los demás ¡explótalo!
Gracias a El otro lado de la isla por volverme a dejar pasar por aquí ¡Nos leemos!
Marina Ortega, Periodista y Blogger en Cargada con Libros.
Estoy de acuerdo en todo lo dicho.
Sobre todo con el punto 4.
¡Un beso!